Jesús del Monte: Una mirada sociológica objetiva a su desarrollo social y urbanístico (página 2)

Ocupaciones masculinas por razas en
Jesús del Monte.

(1854)

De esta tabla podemos entender que la mayoría de
las ocupaciones no requerían de una alta
calificación, la de mayor representatividad era la de
labrador – trabajador agrícola – y algunas otras
como vendedores y tabaqueros, casi todas estas ocupaciones –u
oficios– se transferían como
reproducción de padres a hijos, pero lo
más significativo es la pobreza representativa de los
negros comparada con la de los blancos, un negro esclavo, en
Jesús del Monte –y en Cuba-,
podía ser cualquier cosa que deseara su dueño
–producto de la esclavitud– pero socialmente no era
nada, aunque fuera libre solo podía ser lo que la sociedad
le permitiera, para comprobarlo solamente debe observar a las
profesiones que se dedicaban, pero también es innegable
que ya se va perfilando una nueva estructura social donde los
oficios y profesiones van ocupando determinados espacios dentro
del entramado social suburbano, Jesús del
Monte va dejando de ser suburbio, periferia, campo y
eminentemente agrícola, esto, innegablemente, significa
desarrollo, aunque determinadas estructuras sociales permanezcan
iguales, sobre todo la posición del negro, tanto es
así que el propio Pezuela señala en su cita
anterior que la población ya ascendía a 4200
almas.

Continuando en este recorrido por Jesús
del Monte a través del tiempo y la
población llegamos al año 1861 que se
efectúa otro censo, no he podido encontrar referencias
puntuales sobre el territorio pero de forma global se afirmaba
que la Habana tenía una población de 393789
habitantes, pero de alguna manera se pueden sacar determinadas
conclusiones conjugando informaciones, según un articulo
publicado en la "Revista de Indias", vol. LXXI,
en el número 251, se señala lo
siguiente:

…En 1861 la Jurisdicción de La
Habana estaba subdividida en seis distritos y 37 barrios, el
Primero y Segundo comprendían la parte
<<intramuros>>, es decir, la parte más antigua
de la ciudad, desde las murallas hacia el mar en la
bahía…

…En los distritos del Tercero al
Sexto…se registraron 12,552 fincas urbanas y una
población de 138,144 habitantes que representaban el 69,8%
y el 73,3% de los totales respectivos en la Jurisdicción.
Estos distritos <<extramuros>>comprendían a un
tercio en expansión y eran los barrios más poblados
y de inferiores condiciones de vida de la población
habanera, en los cuales por ejemplo, el 38,7% de las fincas
urbanas eran de tabla o
embarro…[22]

Jesús del Monte formaba parte del
Quinto Distrito por tanto, en lo tocante a la
situación poblacional estas citas lo incluían y por
lo que parece ser el estado urbanístico se
correspondía, el lector debe recordar las diferentes citas
de Pezuela, hombre que precisamente vivió
y refirió la situación habanera de esa
época.

En el buque Oquendo, llegó el primero de los
culíes chino a Cuba en 1847, este fue el primer
grupo de colonos asiáticos que puso sus pies en un puerto
de la isla, Jesús del Monte, según
parece indicar, no fue un territorio donde debieron vivir muchos
de ellos, por lo menos eso es lo se puede encontrar en el archivo
de la parroquia donde existe un solo libro de registros de
asiáticos, los asientos de entierro no son muchos y un
número significativo de ellos fueron transferidos de otros
lugares, el primer entierro en el cementerio de la parroquia se
efectuó el 12 de noviembre de 1866, luego,
esparcidos en el tiempo se fueron sucediendo algunos
otros.

Primeros entierros de chinos en el
cementerio de Jesús del Monte.

En 1869 se publica un censo sobre el estado de la
esclavitud en Cuba, lo realizó la Junta de
Colonización producto de la Ley Moret, se dice que se
habían emancipado en Cuba 50046 esclavos pero no se
incluye "por error" los datos fieles de La
Habana.[23]

Fragmento de una tabla donde se
muestra el número de esclavos en los diferentes censos y
padrones de finales del siglo XIX, véase las cifras de La
Habana.

Posteriormente aparecen otras cifras dadas como una
"rectificación" pero realmente aún en 1884
el número de esclavos en La Habana era elevado por tanto,
en Jesús del Monte, por sus
características suburbanas debían existir
todavía un número significativo de
ellos.

"Rectificación"

Puede ser que el lector estime que estos datos son muy
genéricos, no deja de tener razón, pero son
también muy válidos porque, al no poder contarse
con el dato puntual, el global nos brinda determinada posibilidad
de aproximación al fenómeno que se busca, algo,
siempre es más que nada.

De esta manera llegamos cronológicamente al
año 1899 donde se produce el último censo
del siglo, este se publicó por el Departamento de Guerra
de Estados Unidos en Washington el 25 de agosto de 1900,
con el título "Informe sobre el censo de Cuba,
1899" en él se afirma que la población de
la Habana era de 424811 ya había crecido
considerablemente en relación con la total de
Cuba.

Informe sobre el censo de Cuba,
1899.

Para la fecha la situación en Jesús
del Monte había cambiado, la esclavitud se
había abolido y se consideraba como un área urbana,
su población había crecido y se encontrada entre
los barrios más poblados, según el propio censo
ascendía a 9369 personas, observemos la siguiente
tabla:

Población de los barrios de La
Habana en 1899.

A partir de este momento se comenzarán a producir
cambios significativos en Jesús del Monte
pero no podemos olvidar la situación urbanística y
social heredada, esta seguirá presente durante un tiempo
prolongado en el territorio, para ilustrar esta herencia –y
ante la falta de datos oficiales– acudimos a los libros del
archivo de la parroquia, valiéndonos del Libro 7 de
Bautismos, correspondiente al intervalo temporal comprendido
entre el 17 marzo de 1912 y el 24 febrero de 1913
para que coincida con el momento histórico que estamos
analizando, revisamos las profesiones de los padres de los
bautizados, de este estudio obtuvimos el siguiente resultado que
le mostramos en forma de tabla, se trata de las profesiones que
desempeñaban un amplio sector de la población de
Jesús del Monte en ese tiempo.

Sabemos que este dato no es oficial y que tampoco
representa a la totalidad de la población pero, nos brinda
un reflejo de la realidad objetiva en ese instante en el
territorio, que en nuestra opinión, no estaba muy alejada
de los resultados de la tabla, si comparamos este, con el que
anteriormente presentamos –de 1854-, veremos que hay
todavía, determinada correspondencia y
similitud.

La llegada del siglo XX encuentra una
Habana que había crecido
desorganizadamente y sin mucha coherencia, producto
–fundamentalmente– de iniciativas privadas, sin un
sentido de urbanización integral, habían surgido
espacios interurbanos dispersos que daban una impresión de
discontinuidad, los niveles de salubridad dejaban mucho que
desear, se imponía, luego de un período de
economía de guerra, acometer la restructuración
urbanística de la ciudad, cuestión que
comenzó temprano en una Cuba republicana que nacía
con <<más sombras que luces>>, esto no quiere
decir que el impulso remodelador llegara inmediatamente a
Jesús del Monte, este territorio y otros
más antiguos, tenían que enfrentar la competencia
de otras zonas más vírgenes en las que ya se
venía pensando y trabajando, que podían
proporcionar la expansión de la capital con mayor
facilidad, según Jorge Pave:

…A partir del año 1902,
después de la parálisis económica prolongada
de la ultima guerra de independencia, se observa en La Habana un
boom inmobiliario que va a impactar particularmente el Vedado
favorecido por su planificación anterior, frente a otros
barrios periféricos como Jesús del Monte,
Luyanó y la Víbora, de calles mas estrechas,
hacinamiento y faltos de
planificación…[24]

De ningún modo quiere esto decir que no se
construyera en Jesús del Monte, ya se
verá el litigio de las casas del ángulo de Quiroga
en 1903, solo que estas construcciones respondía a
iniciativas privadas y no a un plan de urbanización del
territorio, estos se comienzan a manifestar en La Habana en la
propia primera década del siglo con propuestas de
"Planes directores", pero todos fueron
inicialmente desechados, veámos lo que dice de esta etapa
Gabino Ponce Herrero:

…en la primera mitad del siglo XX se
sucedieron una serie de reflexiones y propuestas que, si bien
tuvieron gran influencia en los planes posteriores, fueron
obviadas en su momento. Entre ellas destacan los trabajos en 1905
de Raúl Otero, el Plan de Vías Maestras de Camilo
de Castro, de 1912, y el proyecto de Plan Director de Urbanismo
para La Habana de Pedro Martínez Inclán, de 1925,
todos los proyectos sin aplicación, que presentaban la
constante de la preocupación por la ordenación del
dilatado territorio urbano, incorporando equipamientos
específicos para servicios urbanos y articulando las
diferentes partes fragmentadas de la ciudad mediante una densa
red de grandes vías de circulación complementarias,
de trazado radial y de
circunvalación…[25]

Una vista de la Calzada de 10 de
octubre en la década del cuarenta del siglo
XX.

Estos no fueron los únicos diseños de
planes entre 1898 y 1959 para modernizar y tratar
de darle un orden urbanístico coherente a la Habana, pero
lo cierto es que, hasta la década del 40, no se plantearon
reformas de importancias en Jesús del
Monte, hasta ese momento el territorio había
heredado una arquitectura típica del siglo XIX,
donde proliferaban las casas de una sola planta, muchas de madera
y de tejas aún, lo cruzaban varios arroyos y muchas calles
no salían a la calzada de 10 de octubre.

Tamarindo y Maboa en la década
del cuarenta.

A partir de la década del cuarenta se pone en
práctica un Plan Director que incluye a
Jesús del Monte y determinadas iniciativas
privadas que lo complementaban, sobre todo en las edificaciones
de viviendas que no eran parte de este Plan Director.

Fachada de un antiguo comercio en la
calzada de 10 de octubre.

Muchas de las viviendas pasaron a ser de dos plantas y
se les reformaron sus fachadas, fundamentalmente a los estilos de
la época, se pueden encontrar exponentes eclécticos
y Art Deco que buscaban propiciar a la comunidad
–fundamentalmente a sus principales arterias -de aires
de modernidad.

Una edificación construida o
reformada en 1941.

En relación con el aspecto vial, algunas calles
encontraron su salida a la calzada de 10 de octubre en este
momento constructivo, como el caso de Maboa cuyo arroyo –del
mismo nombre-, fue entubado, para ello fue necesario demoler
innumerables construcciones.

Salida a 10 de octubre de la calle
Maboa y vista actual.

Agua dulce sufrió una remodelación
profunda producto de la construcción de la plazoleta del
mismo nombre y de la Vía Blanca, este lugar de mucha
confluencia vial, marcaría el kilómetro cero de
dicha arteria, aunque el proyecto no se ejecutó
completamente, según el diseño original, el lugar
se transformó en aquel momento, luego se le
realizarían otras transformaciones a lo largo del tiempo
hasta llegar a su estado actual.

Proyecto y resultado final de la
plazoleta de Agua Dulce.

A todo lo largo de la calzada y sus calles transversales
se operaron cambios de tipo urbanístico, otro lugar que se
transformó fue el conocido hoy como la Plaza
Roja y la construcción del instituto de la
Víbora.

Zona de la Plaza Roja en la
Víbora.

Otro aspecto poco difundido de este plan de
urbanización fue la construcción de parques y
áreas verdes dentro de la ciudad, en Jesús
del Monte también se construyeron varios que
aún existen en su entorno.

El parque
Córdoba.

Otros planes de carácter urbanístico que,
de alguna manera, tuvieron que ver con la zona de
Jesús del Monte -tanto por la
división política administrativa como por la zona
parroquial de aquellos momentos-, aunque ahora más
lejano, fueron los llevados a cabo en
Luyanó entre los años finales de la
década del cuarenta y la década de los cincuenta,
el "Barrio Obrero" o –como se conoció en aquellos
momentos– "El Parque Residencial Obrero de Luyanó",
que se ubicó entre la Vía Blanca, los repartos
Guardiola y Rocaford, Alturas de Luyanó y Martín
Pérez, fue dirigido por una figura que ya hemos mencionado
anteriormente, Pedro Martínez Inclán, y
según se afirmaba, estaba concebido para destinarlo a los
trabajadores, cosa muy ambigua y poco probable en la época
porque ¿de donde saldría el capital para
construirlo?, baste leer la siguiente cita para entender
esta preocupación:

…En Cuba no existían legislaciones
que tendieran a propiciar el desarrollo y la creación de
cooperativas para la construcción de viviendas
económicas, lo que suprimía la iniciativa privada o
semiprivada de la inversión de
capital…[26]

El Barrio Obrero de
Luyanó.

No es el objetivo aquí entrar a analizar
profundamente lo referente a cada plan, lo que nos interesa es
mostrar aquellos que incluyeron a Jesús del
Monte, hasta en sus lugares más lejanos y que
ayudaron a transformar el panorama urbanístico heredado de
la etapa colonial.

Avenida Dolores -Lawton-
1944

El lector no debe creer que estos planes de
urbanización, –ni otros que se llevaron a cabo en el
período– significaban mucho en término social,
sobre todo para las clases más pobres, basta leer la
siguiente cita para quedar mejor ilustrado:

…El periodo de obras generó
importantes beneficios privados -lícitos e
ilícitos-, las avenidas pusieron nuevo suelo en el mercado
inmobiliario y las obras crearon empleo público. No
obstante, desde el punto de vista de un urbanismo integral, las
carencias se manifiestan en la ausencia de propuestas
válidas para resolver el problema de la vivienda obrera y
en la falta de mecanismos de control público de la
gestión y promoción del suelo, cuya
ocupación sólo obedecía a intereses
especulativos. Esa carencia se plasma en la falta de
definición de zonas para usos específicos y la
ausencia de nuevas áreas funcionales para dinamizar la
vida económica de la
capital…[27]

Al término de la década del cincuenta se
produce el triunfo revolucionario de enero de 1959 en
Cuba, se comienzan a generar cambios sustanciales en el aspecto
social, Jesús del Monte no queda al margen
de estos acontecimientos, se operan las reformas en la
enseñanza, antiguas estaciones de policía –
como la 11na de 10 de octubre– fueron convertidas en
escuelas, igual que otras instituciones dedicadas a la
enseñanza que anteriormente eran privadas donde se pueden
incluir conventos, institutos de enseñanza etc. y que en
el territorio existían más de una, en la esfera de
la salud sucedió igual con las clínicas privadas
que existían en el territorio, a través de las
nacionalizaciones la salud y la educación se pusieron a
disposición de todos, de la misma forma que la posibilidad
de empleos y del acceso a actividades como la educación
física, etc.

Poco a poco fueron ascendiendo los valores en los
indicadores sociales, impulsados por un proyecto social
compartido, con virtudes y defectos, con aciertos y desaciertos
pero innegablemente con un alto sentido de la igualdad y la
dignidad, sobre todo la dignidad planteada desde los preceptos
martianos.

En el aspecto territorial hoy Jesús del
Monte es un Consejo Popular del municipio 10 de octubre,
sus límites se diferencian de los que hasta ahora hemos
conocido, dependen de la División Política
Administrativa actual, veámos entonces el comportamiento
de los mismos indicadores que hasta estos momentos hemos venido
analizando para continuar en una misma línea de
análisis, utilizaré la actualización del
cierre estadístico de la ONE del año 2010,
válido para el transcurso del 2011, comencemos entonces
por su extensión territorial.

Extensión de los Consejos
Populares del municipio 10 de octubre.

Como se puede observar, Jesús del
Monte no es el territorio dentro del municipio de mayor
extensión pero sí es uno de los de mayor porciento
poblacional, esto se puede comprender claramente partiendo de
saber que la génesis poblacional de todo ese territorio
comenzó exactamente por ahí, analicemos la
siguiente tabla para corroborar este planteamiento.

Población de los Consejos
Populares del municipio 10 de octubre.

El nivel educacional y la instrucción actual del
habitante de Jesús del Monte es similar a la de cualquier
territorio del país, la ONE no en su informe no
particulariza por Consejos populares pero sí lo hace con
el municipio, como se puede apreciar es bastante
elevado.

Cuba muestra un envejecimiento de su población al
nivel de los países desarrollados, a pesar de ser un
indicador algo contradictorio también indica que la
población de la tercera edad es atendida y que la
esperanza de vida de la sociedad en general ha aumentado,
Jesús del Monte, tiene un nivel de envejecimiento
poblacional significativo dentro del municipio.

Hasta aquí hemos mostrado una extensa
panorámica del desarrollo social y urbanístico de
Jesús del Monte, variados pudieron ser los
indicadores seleccionados pero nos interesaba mostrar algunos
puntos de vistas diferentes que generaran también
análisis diferentes y romper así el manido
cliché respecto a la manera de abordar al territorio,
Jesús del Monte -con sus peculiaridades- no fue muy
diferente socialmente a cualquier otro territorio de nuestro
país, en ninguna de las etapas que ha vivido.

Autor:

Lic. Lázaro Numa
Aguila

La Habana, junio de 2012

[1] Del libro [en proceso] “Al sur de
la ciudad, Jesús del Monte: una parroquia en el centro
de la historia local”.

[2] Guerrero, Teodoro; Un año en La
Habana, Semanario Pintoresco Español, Imprenta y
establecimiento de grabado de Don Baltasar González,
Madrid 1846, Tomo – I, p[472].

[3] De la Pezuela, Jacobo; Diccionario
Geográfico, Estadístico, Histórico de la
isla de Cuba, Tomo-III, Imprenta del establecimiento de
Mellado, Madrid 1863, p[484].

[4] Cuadro estadístico de la siempre
fiel isla de Cuba, Oficina de las viudas de Arazoza y Soler,
Imprenta del Gobierno y Capitanía General, Habana 1827,
p[60].

[5] Del Monte, Domingo; Centón
Epistolario, Volumen I, Biblioteca de Clásicos Cubanos,
p [287].

[6] Mapa de Esteban Pichardo 1881, Mapa
turístico de la ESSO 1956, Mapa turístico GEO
1996.

[7] Del Monte, Domingo; Centón
Epistolario, Volumen II, Biblioteca de Clásicos Cubanos,
p [207].

[8] Gómez, José María;
Memoria sobre la conservación del puerto de la Habana,
Imprenta de D. Miguel A. Martínez, 1831, p [112].

[9] De la Pezuela, Jacobo; Diccionario
Geográfico, Estadístico, Histórico de la
isla de Cuba, Tomo-III, Imprenta del establecimiento de
Mellado, Madrid 1863, p[483-484]

[10] Sínodo Diocesano 1684; Imprenta
del Gobierno y Capitanía General, Reimpreso: Habana
1844.

[11] Fernández Escobio, Fernando; El
Obispo Compostela y la iglesia cubana del siglo XVII, Repid
Printing Fla., p[161].

[12] Se respeta la redacción y la
ortografía original.

[13] Blanchet, Emilio; Compendio de historia
de Cuba, Imprenta de la aurora del Yumurí, de
José Curbelo y Hnos. Matanzas 1866, p[38].

[14] Saco, José Antonio; Historia de
la esclavitud, Biblioteca de Clásicos Cubanos, Volumen
V, Editorial Imagen Contemporánea, Habana 2006,
p[18].

[15] Santa Cruz y Montalvo, Mercedes (Condesa
de Merlin); Los esclavos en las colonias españolas,
Imprenta de Alegría y Charlain, Madrid 1841, p[67].

[16] Plegable Censos en Cuba, Oficina
Nacional de Estadística ONE, La Habana 2012.

[17] Humboldt, Alejandro de; Ensayo
político sobre la isla de Cuba; Editorial Biblioteca
Ayacucho, Caracas, Venezuela 2005, p[40].

[18] Bernal Muñoz, José
Antonio; Memoria sobre la Epidemia que ha sufrido esta ciudad
nombrada vulgarmente “El Dengue”. Oficina del
Gobierno y Capitanía General, Habana, 1828.

[19] Resumen del censo de población de
la isla de Cuba a fin del año de 1841, Imprenta del
Gobierno y Capitanía General, La Habana 1842.

[20] De la Pezuela, Jacobo; Diccionario
Geográfico, Estadístico, Histórico de la
isla de Cuba, Tomo-III, Imprenta del establecimiento de
Mellado, Madrid 1863, p[484]

[21] Según la cita de la autora,
perteneciente al Fondo: Misceláneos de expedientes, 3885
/ E, 22 de abril de 1854, Estadísticas del barrio de
Jesús del Monte. Ocupaciones. Archivo Nacional de
Cuba.

[22] Quiñones González,
Fernando; Pérez – Fuente, Pilar; Valverde Lola;
Hogares y familia en los barrios populares de la Habana en el
siglo XIX. Una aproximación a través del censo de
1861, p[8].

[23] Piqueras, José Antonio; Revista
de Indias, 2011, vol. LXXI, núm. 251, Censos Lato Sensu.
La Abolición de la esclavitud y el número de
esclavos en Cuba, p[7].

[24] Ojeda Pavez, Jorge; Territorios e
identidades en la ciudad de La Habana, Cuba: el caso de El
Vedado (1860-1940). Informe final del concurso: Culturas e
identidades en América Latina y el Caribe. Programa
Regional de Becas CLACSO. 2001.

[25] Ponce Herrero, Gabino; Planes de reforma
urbana para La Habana: la modernización de la ciudad
burguesa (1898-1959), Departamentos de Geografía humana,
Universidad de Alicante, p[329].

[26] Reyes, Amaury; Transformaciones en el
barrio obrero ¿necesidad o disciplina?, Nuevo Espacio,
Arquitectura y Urbanismo, Vol. XXVIII, No. 1/2007.

[27] Ponce Herrero, Gabino; Planes de reforma
urbana para La Habana: la modernización de la ciudad
burguesa (1898-1959), Departamentos de Geografía humana,
Universidad de Alicante, p[338].